Buscar este blog

jueves, 28 de julio de 2011

Perú y su versión de "la centro-izquierda humalista"


27/07/2011
María Camila Morales
El nuevo presidente del Perú, Ollanta Humala, recibe un país calificado por las agencias financieras como “muy recomendable” para invertir en América Latina. Su crecimiento económico ha superado el 6% durante los últimos diez años. Sin embargo, “el milagro peruano” como se refieren los expertos a los resultados de su país no ha logrado mejorar el nivel de pobreza, salud y educación de sus compatriotas.
Su discurso de inclusión social y lucha por la redistribución de ingresos logró que el electorado lo apoyara. Sobre todo los habitantes del interior del Perú, quienes en su mayoría no han sido beneficiados por la bonanza económica.
Difícil asegurar que sus vínculos con Chávez hayan sido un factor determinante para la victoria como se predecía en el 2006 (incluso dicen fue la razón de aquella derrota). En esta campaña electoral, Humala optó por alejarse de “la órbita chavista” como explica la revista Caretas. Muy bolivariano o muy socialista, el líder venezolano le habría traído más dolores de cabeza que votos.
Tampoco habría mantenido a su duro núcleo “humalista” por ser considerado demasiado radical. Palabras mayores cuando se trata de economía y por eso su asesor Félix Jiménez se esfumó de su equipo después de la primera vuelta.
En cuanto a sus seguidores que se unieron en sus inicios políticos al etnocacerismo (nacionalismo étnico prehispánico del imperio Inca) fueron alejados y negados. El primero su hermano Antauro quien se encuentra en la cárcel por la masacre del Andahuaylazo.
El éxito de Ollanta Humala habría sido defender el lema: “la derecha de la izquierda”. Una teoría importada de Brasil y de los asesores de imágen Luis Favre y Valdemir Garreta, quienes ayudaron al ex presidente Lula. Una propuesta política moderada que no desprecia el crecimiento económico pero que lo pone al servicio de la inversión social. Un punto fundamental que debe darles a las empresas extranjeras confianza en su mandato. Porque para implementar sus promesas electorales: Agua Para Todos, Pensiones 65 o Beca 18 entre otras, necesitará presupuesto.
Ardua tarea la de llevar más dinero a las arcas del país que no puede venir exclusivamente de la inversión extranjera. Persisten además las contradicciones en cuanto al nuevo régimen impositivo minero, clave para el desarrollo peruano.
Respecto a la producción de gas, otra pieza fundamental de la economía, se habla de renegociación de contratos. Aunque Humala aseguró que no nacionalizará ni expropiará como algunos de sus vecinos, hay varias compañías multinacionales preocupadas. En Arequipa, siendo candidato dijo: “el gas será para los peruanos!”. En la mira estaría el gas de Camisea.
Varios interrogantes quedan a nivel de política internacional : ¿qué tan alejado logrará mantenerse Humala de Chávez, se unirá finalmente a la Alianza del Arco del Pacífico, modificará el equipo que demandó a Chile en la Corte de la Haya, sobrevivirá el TLC con Estados Unidos? Por el momento siguen las múltiples celebraciones de una nueva opción para el futuro del Perú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario