Buscar este blog

viernes, 30 de diciembre de 2011

Motivos para no celebrar el 2011


30/12/2012

María Camila Morales

Se acaba el año y en América Latina los diarios hacen el balance del 2011 destacando el gran éxito económico para la región. Si comparamos nuestra situación con la de Europa y Estados Unidos, tendríamos que celebrar con champaña los resultados macroeconómicos que publican la CEPAL, el FMI y el BID.

El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Luis Alberto Moreno dijo en su mensaje anual: “vamos por buen camino”. En efecto, la crisis económica que vivieron los norteamericanos y europeos no llegó como un tsunami a América Latina.

Festejemos diciendo que nos salvamos pero no nos vanagloriemos con las cifras de la región. Regresando de una estadía en varios de sus países este 2011, algo me parece no estar acorde con la euforia de los economistas y los políticos. Se llama realidad cotidiana.

Las cifras de crecimiento, inversión y comercio serían alentadoras si se vieran reflejadas en el bienestar diario de los latinoamericanos de todas las clases sociales en puntos fundamentales como: infraestructura, salud, educación, alimentación, trabajo y seguridad.

Como dice el columnista de la Folha de São Paolo, Clovis Rossi: “sabemos que en materia de desarrollo humano Brasil ocupa el vergonzoso puesto 84 y es más vergonzoso cuando somos la sexta economía del planeta.” Pese a las diversas carencias para millones de brasileños, el optimismo financiero reina.

¿La fiesta de Brasil hasta cuándo va a durar? Esa pregunta aún no tiene respuesta pero hay señales preocupantes como alertaba en mayo pasado Moisés Naím en El País: el real es la moneda más sobrevalorada a nivel mundial y los hogares gastan 20% de sus ingresos pagando sus deudas cuyas tasas de interés son las segundas más altas del mundo. La inflación superó el 6% y se sienten medidas proteccionistas en el comercio que pueden llegar a elevar la tensión con sus socios y amigos del Mercosur.

Para los chilenos, otro alumno ejemplar de crecimiento, el futuro es  preocupante. Desde septiembre un documento del FMI señala que su sistema financiero es el más expuesto de toda la región si las economías europeas más golpeadas (Grecia, España, Italia, Portugal, Irlanda) se declaran en default. Con un 23% de popularidad, Sebastián Piñera tampoco tiene mucho margen de maniobra en el manejo de la crisis de la educación que sigue sin resolverse.

En Colombia, el editorial de El Tiempo habla de “Los motivos para celebrar el 2011”: el ánimo positivo de los consumidores que se ve plasmado en la venta de 325.000 vehículos. Pero olvida decir que no hay infraestructura nacional ni local que pueda recibirlos para que circulen sin generar más caos.

El crecimiento del PIB fue del 5,5%, pero no se ha visto ni la sombra de dicho aumento en las vidas de los miles de damnificados del invierno del 2010 que siguen con el agua hasta las rodillas.

En los noticieros lo que si abunda son los casos de corrupción con el robo del dinero que estaba destinado a los más pobres y más hambrientos. En octubre 13 mil cajas de leche fueron encontradas podridas cerca a la ciudad de Santa Marta. Eran parte del programa desayunos infantiles del Instituto Colombiano de Bienestar Infantil.

Los venezolanos no se quedan atrás. La pertinencia de la política chavista se ve reflejada en el tuit de Arturo Alvarez, ciudadano común preocupado por su país, (@el5toelement): “Aumenta el queso, desaparece la leche, no hay carne, no hay azúcar...para qué carajo se expropiaron las fincas productivas?”

Y si el socialismo no resuelve problemas de la canasta familiar tampoco ayuda a disminuir la violencia. Las cifras del diario El Nacional son aberrantes: 19.000 homicidios en el 2011 otorgándole el primer puesto de inseguridad de América del Sur.

Dentro de las buenas noticias del 2011, está también la expansión de la minería y la industria petrolera que insisten son la locomotora de las economías como Ecuador, Perú, Argentina y Bolivia. Pero no se habla mucho del impacto que han tenido para el medio ambiente y de la defensa que han emprendido las comunidades afectadas.
En Arequipa, en abril los enfrentamientos con la policía dejaron 3 muertos, 53 heridos y el retiro de Southern Perú Corporation de su nuevo proyecto de exploración en Tía María.

Y no podemos olvidar América Central en el repaso del 2011. Panamá creció 10.5% pero sigue sin encontrar una solución para la crisis agropecuaria y la llamada “seguridad alimentaria” para los panameños. Lo que el ex ministro Emilio Kieswetter calificó como : el hambre de importar por puro lucro.

En cuanto al narcotráfico, el tema se les salió de las manos a los gobiernos centroamericanos. Sus fronteras se han convertido en un corredor de droga y de inmigrantes que los carteles, bandas criminales y corruptos militares se quieren apoderar a punta de bala.

México sigue creciendo pero debe invertir en su guerra abierta contra los narcos. De los periodistas asesinados por el momento no habría tiempo para ocuparse ya que la atención está volcada en los partidos políticos infiltrados por los narcotraficantes y las acciones sangrientas de los grupos paramilitares como los Matazetas.

Sí, este año América Latina evitó un escenario económico catastrófico. Pero sus problemas siguen en lo que se refiere a desarrollo humano, un índice que mide la posibilidad de un mejor futuro para las siguientes generaciones de latinoamericanos.

Ojalá que los festejos del 2011 no nos despierten con un horrible remezón cuando nos demos cuenta de lo que no se hizo en América Latina con la bonanza del año que terminó.

jueves, 15 de diciembre de 2011

¿La adopción: un imposible para los homosexuales en América Latina?


15/12/2011
María Camila Morales
¿Qué se le debe dar a los niños en época de Navidad? Muchas personas piensan en los regalos pero olvidan lo fundamental: cariño y un hogar feliz.
Eso es lo que quiere ofrecerles el columnista del diario New York Times, Chandler Burr, a sus dos hijos (13 y 10 años) adoptados legalmente en Colombia. Sin embargo, puede que su deseo no se realice porque la Procuraduría General de la Nación quiere impugnar el proceso de adopción.
Chandler Burr es homosexual. En Colombia como en Latinoamérica, la Iglesia y una parte importante de la sociedad siguen pensando que ser homosexual es incompatible con tener una familia y hasta con Dios.
Algunos abanderados de los valores humanos decidieron que los homosexuales no pueden ser ni buenos padres ni buenas madres y mucho menos darles a los hijos adoptados una vida estable. Concluyen entonces que solamente un hombre y una mujer son capaces de criar hijos modelos que repetirán las maravillas que producen todos los matrimonios heterosexuales.
Pero ¿qué necesita realmente un niño para ser feliz y poder crecer como “una persona buena”?. Porque al parecer, esa es la principal preocupación de la Iglesia católica colombiana: un homosexual no puede brindarle felicidad a un hijo y sobre todo lo llevará por el camino de las aberraciones sexuales.
Las teorías de lo que necesitan los hijos son múltiples y varían con las épocas y las escuelas de psicología. Van desde la imagen de un padre y una madre hasta la disciplina y la libre afirmación de su personalidad. Pero cada teoría tiene su contradicción: ni los hijos de madres cabeza de familia ni los huérfanos son necesariamente desadaptados sociales o desequilibrados mentales.
La homosexualidad no es una enfermedad, ni un vicio ni una tragedia. Tampoco es una tendencia sexual o cruce de cables como dice Monseñor Juan Vicente Córdoba, Secretario General de la Conferencia Episcopal. Es una realidad que en América Latina la mayoría de personas siguen desconociendo y/o prefieren criticar.
Mientras el periodista de Nueva York intentaba explicar que su comportamiento como padre no es diferente a aquel de un “hombre”, en la televisión nacional los homosexuales son un tema de burla. Para los libretistas ser homosexual equivale a una caricatura de la cual se puede hablar en América Latina en horarios familiares.
¿Por qué no muestran a las parejas homosexuales estables, con éxitos, dolores y sentimientos iguales a las erróneamente llamadas parejas normales? El bienestar de los hijos (adoptados o no) es una cuestión de amor, responsabilidad y madurez y no de “preferencias sexuales.”
No es la condición sino el comportamiento de los padres como seres humanos el que deberían estudiar las autoridades competentes. Y eso fue lo que hizo la juez de familia que aprobó la adopción de Burr; nunca le preguntó ni por su orientación sexual ni por su religión pues habría sido una discriminación. En Colombia las personas solteras sí pueden adoptar.
A Chandler Burr lo van a acusar de no haber revelado su homosexualidad a la hora de hacer la solicitud de adopción de los dos menores de edad. Sin duda una omisión fundada por la homofobia que existe en varios sectores de la sociedad colombiana.
Según el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) hay 8.811 niños “difíciles” que por su avanzada edad no encuentran hogares de heterosexuales que los quieran adoptar. Viven en orfanatos y deben estar oyendo con gran desconsuelo el debate religioso y jurídico de los adultos que dicen velar por sus derechos.
Ojalá que cuando estén tristes y soñando con el abrazo de un padre o una madre que los quiera no se encuentren con una sociedad que quiere cerrar las puertas a dicha felicidad.
Si en el caso de Chandler Burr se está juzgando la moralidad, lamentablemente tanto la Iglesia católica como la rama judicial en Colombia tienen “omisiones” más serias que las del padre adoptivo.

lunes, 5 de diciembre de 2011

La CELAC otro espejismo latinoamericano


5/12/2011

María Camila Morales

Si el Purgatorio está tapizado de buenas intenciones según el refrán  popular, los latinoamericanos y caribeños lo viven todos los días por culpa de sus mandatarios.

En Caracas el fin de semana pasado, nació otro proceso de integración regional de la mano del presidente Hugo Chávez. La CELAC: la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.

Una vez más vimos un gran despliegue diplomático, una intensa agenda temática, largos discursos y sonrisas para las fotos históricas que se supone marcaron el inicio de la unidad latinoamericana.

La CELAC se suma y no diluye - como advirtió el presidente Juan Manuel Santos - a la OEA, a UNASUR, al ALBA, a la Alianza del Pacífico, a CARICOM, a la ALADI, al SELA y a la CAN entre otros. Es decir: una iniciativa más o como dice el diario Página12 : “otra forma de reunirse y discutir en un mundo multipolar”.

Y al parecer eso es lo que caracteriza a la región: las cumbres, las reuniones extraordinarias y las conferencias pero los problemas siguen siendo los mismos. Aunque los múltiples organismos regionales deberían acercar a los gobiernos y ser el foro para resolver las diferencias sin tutelas de nadie, como asegura el mandatario de Ecuador Rafael Correa, los países de la zona no lo logran. Suelen terminar, en especial los vecinos, en crisis diplomáticas con graves consecuencias económicas para los involucrados.

En Caracas, el presidente chileno Sebastián Piñera le dejó claro a su colega Evo Morales que la salida al mar que reclama Bolivia se zanjará bajo la lupa de los acuerdos internacionales vigentes. Poco margen tendrá entonces la CELAC para dirimir dicha controversia.

Los conflictos ideológicos y hasta las peleas de vieja data terminan tarde o temprano opacando el avance de la unión y de sus supuestos frutos. Raúl Castro en su discurso explicó a todos los países la necesidad de cortar con el yugo norteamericano si quieren una verdadera integración.

Otra inquietud que deja la CELAC es ¿cómo va a ser financiada su agenda? Porque sus ambiciones son numerosas y necesitan que sean implementadas por algunos funcionarios. Las cancillerías de los 33 países no tienen la capacidad de ocuparse de todo.

“Coincidencialmente” el Secretario de Administración y Finanzas de la OEA, Gerald Anderson, recordó que varios países tienen deudas pendientes con ellos. Brasil debe nueve millones de dólares y Venezuela dos y medio millones de dólares. Estas no son muestras alentadoras del compromiso de seriedad adquirido con dicha organización.

La cantidad y la calidad no pueden ser confundidas una vez más en Latinoamérica. Si la CELAC va a ser la semilla de la soñada unión continental (sin Estados Unidos ni Canadá) entonces es hora de saber concretamente cómo proceder para poder integrar los mecanismos ya existentes.

Por el momento habrá que dar un compás de espera pues aún no se sabe si las decisiones de la CELAC se tomarán por consenso o por mayoría. Ojalá que cuando esos detalles se solucionen seguramente en otra cumbre, la integración de la que tanto se ha hablado pase de los discursos a la realidad.

lunes, 28 de noviembre de 2011

¡No más FARC!


28/11/2011

María Camila Morales

¿Qué más necesitan los colombianos para volver a las calles a demostrar su repudio hacia  las FARC?

Este fin de semana, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia asesinaron a sangre fría a cuatro de sus secuestrados quienes llevaban más de diez años en su poder: el sargento José Libio Martínez (plagiado en 1997, el militar tenía el triste record mundial de casi 14 años en cautiverio), el coronel Edgar Yesid Duarte, el teniente Elkin Hernández Rivas y el intendente Alvaro Moreno.

Tres policías y un militar a quienes la guerrilla consideraba su botín de guerra y su comodín de canje a la hora de chantajear al gobierno. Según el Ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, tres de ellos recibieron un tiro de gracia en la cabeza y otro un disparo por la espalda. El sargento Luis Alberto Erazo, logró escapar del fusilamiento y fue encontrado por el Ejército escondido cerca al campamento guerrillero en la selva del Caquetá.

La prensa nacional colombiana escribe: “hay una enorme conmoción” y un “dolor que sacude al país” pero reflejado ¿dónde?.

Al parecer en las declaraciones de los políticos que suelen darse golpes de pecho ante las cámaras de televisión cuando suceden estas tragedias. Por su parte, el gobierno del presidente Juan Manuel Santos intenta evitar la polémica acerca de si fue o no un rescate fallido, porque todo indicaría que fueron acribillados en el momento que las FARC sintieron cerca a comandos militares (Fuerzas Especiales) que inspeccionaban la zona tras el rastro de un jefe guerrillero.

En cuanto a la sociedad civil, hasta el momento solamente en las redes sociales se intenta organizar una marcha el martes 6 de diciembre en todo el país. Ojalá prospere y sea una acción de repudio que paralice a Colombia y que demuestre que ningún ciudadano debe ni puede aguantar más barbarie por parte de las FARC.

Un acto de protesta nacional, aunque mucha gente siga pensando que salir a la calle no cambia nada en Colombia. Sin embargo, aún si esas personas no creen en que las FARC dejarán de cometer crímenes atroces, marchar reflejará la solidaridad con las familias de los secuestrados asesinados y con aquellos que siguen privados de libertad. No podemos seguir solamente acordándonos de su terrible situación  en los aniversarios de su secuestro cuando vuelven a los titulares de prensa o cuando la bala de un guerrillero acaba con sus vidas.

¿Dónde está Francia, país que tanto opinó acerca de la liberación de los secuestrados y que pretendía tener contactos para presionar a las FARC en la liberación de “sus prisioneros de guerra”? ¿No es hora de jugar sus cartas para acabar con esa infamia que se llama secuestro?

¿Dónde están los comités de apoyo de Ingrid Betancourt en el mundo que decían que no iban a bajar los brazos hasta ver a todos los secuestrados colombianos libres? Y por supuesto, ¿dónde está la voz de la misma Ingrid Betancourt para condenar y encabezar la crítica internacional contra la crueldad de sus antiguos captores?

El nuevo líder de las FARC, alias Timochenko, le escribía al presidente Santos una carta en la que, trasformado en clarividente, anunciaba: “Todos tenemos que morirnos, Santos, todos”. Gran observador del ciclo de vida pero lo que se le olvida es que matar y morir no son sinónimos. El guerrillero reaccionaba ofendido al "asesinato de Alfonso Cano" quien fue dado de baja en medio de un operativo el pasado 4 de noviembre.

La vida de los colombianos y las acciones de la comunidad internacional no pueden continuar como si nada hubiera pasado el 26 de noviembre. La indiferencia no debe seguir siendo cómplice de las FARC en Colombia y en el mundo. Salir el próximo 6 de diciembre a la calle es una obligación moral de todos los colombianos: ¡no más FARC, no más violencia!

miércoles, 16 de noviembre de 2011

¿Dónde están los petrodólares de América Latina?

16/11/2011

María Camila Morales

Después de una estadía en los Emiratos Arabes Unidos (UAE) es casi imposible no preguntarse qué hubiera pasado en nuestros países si los petrodólares no se hubieran desperdiciado.

Porque la bonanza petrolera (crudo Brent superó 100 dólares en el 2008, 2010 y 2011) le tocó a todos los países exportadores aunque en cantidades y ritmos diferentes, pero millones de dólares llegaron a las arcas de los Estados.

No podemos decir que el emirato de Abu Dhabi sea como Ecuador o que el emirato de Dubai sea como Venezuela pero si hay algunas lecciones importantes por aprender de los países del Golfo Pérsico en materia de diversificación e inversión petrolera. No son tampoco el mejor ejemplo de democracia y de respeto de Derechos del Hombre pero reproches de índole parecida también pueden recaer sobre algunos de los gobiernos latinoamericanos.

Primero que todo en infraestructura: en diciembre de 1971 los Emiratos Arabes Unidos nacieron como país. Después que Gran Bretaña dejara de ejercer su protectorado sobre los emiratos, siete de ellos se pusieron de acuerdo para reunirse y así poder sobrevivir. Perlas, pescado y dátiles eran los productos fundamentales de sus frágiles economías hasta que hallaron petróleo (1966). Los guías turísticos en Abu Dhabi no ocultan que en los años sesenta no había escuelas y que encontrar un doctor era una proeza por no decir un milagro. Pero con los primeros ingresos del oro negro empezaron a construir infraestructura. No solamente para que sus habitantes pudieran vivir con las maravillas del siglo XX (electricidad, agua potable, teléfonos) sino para poder seguir desarrollando toda la cadena productora de petróleo y sobre todo para que sus beneficios quedaran en las manos de los emiratíes (en particular en la familias de los jeques). El resultado fue invertir en carreteras, autopistas, puertos, aeropuertos y plantas de desalinización de agua.

Segundo: la diversificación de su economía. El fallecido jeque de Abu Dhabi, Zayed bin Sultan Al Nahyan, no le apostó exclusivamente al petróleo y reconoció que las reservas un día se agotarían. Por eso impulsó con los primeros petrodólares la creación de servicios financieros, de seguros, zonas francas, y nuevas industrias como aluminio, cemento, textiles y gas. Dubai que además tiene menos petróleo de Abu Dhabi, optó por mejorar el turismo, la construcción y el trasporte marítimo y aéreo. Emirates Airways tuvo ganancias en el 2010 por 1.600 millones de dólares y el aeropuerto Dubai Internacional espera ser en el 2015 el más importante en tráfico de pasajeros y conexiones del mundo.

Tercero: para mantener a los emiratíes contentos los jeques invirtieron en salud, vivienda y educación gratuita para todos aquellos que tienen pasaporte de los Emiratos Arabes Unidos. Privilegios más que derechos comparados con el resto de los habitantes (inmigrantes de India, Bangladesh, Pakistán, Irán entre otros) pero resultan una ganancia que aumenta la prosperidad para casi un millón de personas.

Cuarto: menos impuestos para atraer más inversión. Una teoría que implementó el jeque Maktoum bin Hashar en 1894 quien decidió que los negociantes de perlas no pagarían impuestos. Y la tendencia siguió con la exención del impuesto sobre la renta para todos los comerciantes y trabajadores hasta nuestros días.

Un amigo me decía que los Emiratos pasaron del camello al Rolls Royce sin haber visto un Renault 4 y que ese aprendizaje es necesario para adaptarse a los desafíos del mundo moderno. Pero comparado con América Latina que si vivió la época del Renault 4, pareciera que la bonanza petrolera nunca alcanza para cambiar la vida de quienes también tienen todo el derecho de aspirar a una mejor situación económica.

¿Qué ha pasado con el dinero del petróleo en Colombia? Las prioridades han sido diferentes y la inversión en infraestructura no encabeza la lista. La lucha contra la guerrilla, contra el narcotráfico necesitan financiación y el petróleo es la mejor caja menor. Sin hablar de la corrupción que se denuncia constantemente por el mal uso de las regalías petroleras en los departamentos más necesitados.

En Venezuela, PDVSA la compañía insignia del país, ahora aparece más endeudada que nunca. El diario El Universal escribe: “Ante la voracidad fiscal del Ejecutivo Nacional, ni siquiera el astronómico precio del barril ha cubierto la demanda de recursos por parte del gobierno.” Y añade: “durante el año 2011 Petróleos de Venezuela ha emitido casi 10.400 millones de dólares de nueva deuda”; “la deuda con proveedores a mitad de año se calculaba en 6 millardos de dólares.”

Ecuador y Argentina se suman a los países con petróleo cuyos dividendos son una gran incógnita en cuanto a su apropiada reinversión. Brasil es el único país de la región que ve los frutos de su oro negro en progreso y menos pobreza.

Realidades diferentes (tamaño, regímenes, condiciones geográficas) pero el petróleo en común. Países sin adecuada infraestructura, salud y educación no pueden progresar y los Emiratos Arabes Unidos han trabajado para ponerle coherencia a sus políticas de desarrollo. En efecto las familias de los jeques cada día son más ricas pero reinvierten en sus emiratos. En América Latina los funcionarios que de lejos o cerca tiene que manejar las regalías petroleras se enriquecen y sacan los millones del país.

Venezuela, según últimas estimaciones de la OPEP supera a Arabia Saudita en reservas probadas de petróleo, ¿qué va a pasar con ese tesoro? Ojalá que por lo menos permita construir una autopista que no se caiga y que comunique con rapidez y seguridad a Caracas con el aeropuerto Simón Bolivar de Maiquetía.








miércoles, 26 de octubre de 2011

El hotel siete estrellas y el turismo responsable en Colombia


27/10/2011

María Camila Morales

La luna de miel entre el presidente Juan Manuel Santos y los colombianos empieza a deteriorarse. Su popularidad ha sufrido un remezón con la polémica acerca del primer hotel siete estrellas que se construiría en una reserva natural del país andino.

El mandatario lo anunció como la gran llegada de un motor para la economía de la costa atlántica colombiana. Pero su visión “ecoturística” se transformó en un rechazo en las redes sociales y los medios de comunicación obligándolo el martes 25 de octubre a “dar por muerto” el exclusivo hotel.

El Parque Tayrona es un parque nacional y un territorio sagrado para los indígenas. Los Kogui (pueblo originario de la Sierra Nevada)  aseguraron que no fueron consultados por los inversionistas del complejo turístico y que no entienden la actitud del gobierno.

Lo que pasará es una incógnita, sobre todo a nivel legal dado que el proyecto hotelero habría recibido el visto bueno de la administración del ex presidente Uribe. Sin embargo, la polémica del Parque Tayrona deja sobre la mesa varios puntos fundamentales para el futuro del turismo en Colombia.

Primero: 90% de las tierras del Parque Tayrona son propiedad privada. En el caso del “resort” siete estrellas, el negocio de la cadena hotelera de lujo Six Senses se adelantó con los dueños de los terrenos. Una prestante familia de Santa Marta que siguió el ejemplo de otro “eco-hotel” autorizado en el 2009 por el Ministerio de Medio Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial en la misma reserva natural.

¿Cuál es el papel del gobierno en la reglamentación ecológica de propiedad privada?;¿tiene Colombia un fondo que le permita comprar o expropiar tierras para salvaguardar la biodiversidad y la naturaleza de sus parques nacionales?

Segundo: el turismo será uno de los ejes de desarrollo del gobierno Santos. Dentro del análisis de los diferentes ministerios involucrados los números indicarían que gracias a esta actividad se creará empleo y riqueza. Sin embargo, ¿a qué tipo de turismo se dirige el gobierno de Juan Manuel Santos?

La  Agenda 21 de Naciones Unidas promueve para el mundo un turismo sostenible. Los efectos nefastos del turismo de masa no son un secreto para nadie. En Colombia menos. Basta con ver las playas del balneario de Cartagena de Indias para constatar lo que sucede cuando no se tiene control ni prevención: arena gris y aguas del Caribe poco transparentes.

Tercero: ¿en manos de quién quedarán las autorizaciones para el desarrollo del eco-turismo?. En el caso del Parque Tayrona, las autoridades locales han actuado como promotoras del proyecto. Se vieron personajes del Ministerio del Interior y astutos abogados, todos defendiendo los intereses comerciales y económicos de unos cuantos. ¿Tendrá el nuevo Ministerio del Medio Ambiente la voluntad y capacidad para enfrentar a los empresarios extranjeros y nacionales que han descubierto El Dorado ecológico en Colombia?

El turismo sostenible se ha impulsado como una alternativa para el desarrollo de las zonas rurales más olvidadas por las administraciones anteriores. Pero el error en el que no debe caer Colombia es utilizar a los turistas como única solución para aliviar la pobreza.

No hay que olvidar que la agricultura es la base de la economía local y que velar por su seguridad y fortalecimiento es un deber del Estado. El día de mañana, la bonanza turística se puede acabar y la dependencia puede ser fatal. Lo sienten en estos momentos países como Túnez o Egipto que por coyuntura social (primavera árabe) sufren por la ausencia de los turistas.

Los extranjeros que viajen a Colombia buscarán naturaleza y paisajes. El dilema de Juan Manuel Santos será definir si quiere seguir el modelo de República Dominicana o el de Costa Rica.


lunes, 24 de octubre de 2011

¿Y si Ecuador abandona la Comunidad Andina de Naciones?


24/10/2011

María Camila Morales

El presidente ecuatoriano Rafael Correa espera reunirse con su colega colombiano, Juan Manuel Santos, en la Cumbre Iberoamericana (28-29 de octubre en Asunción) para solucionar ciertos problemas comerciales.

Quiere hablar del comportamiento desleal de los camioneros del vecino país que impiden el ingreso de mercancías ecuatorianas. De no lograr una respuesta satisfactoria, Ecuador abandonará la Comunidad Andina de Naciones. Una amenaza que de ponerse en práctica sería la estocada final del bloque comercial andino.

Según Blasco Peñaherrera, presidente de la Cámara de Comercio de Quito, la CAN tiene un mercado intracomunitario anual de US$7.800 millones con un crecimiento del 35% (datos del 2010).

La CAN fue creada en 1969 y buscaba canalizar un proceso de unión económica al cual aspiraba la región. Sin embargo “la integración andina, suramericana y latinoamericana” en la que trabaja la CAN no ha tenido éxito. El número de países miembros ha disminuido: Chile y Venezuela han salido y le aparecieron fuertes competidores: MERCOSUR y ALBA entre otros. Con la partida de los chilenos (1976 Pinochet) no se alcanzó a hablar de crisis. Pero con la salida de Venezuela en el 2006, la CAN quedó muy debilitada.

Pero en los últimos cinco años, ha logrado recuperarse con el incremento del comercio entre Colombia y Ecuador como consecuencia de la tensa relación que se vivió durante la era Chávez-Uribe. Por eso el Ministerio de Comercio en Bogotá “instó a atender de manera urgente” las peticiones del gobierno de Rafael Correa. Colombia es el segundo socio comercial de Ecuador, después de Estados Unidos.

No es la primera vez que hay distanciamientos comerciales entre Quito y Bogotá, pero ahora el futuro de la Comunidad Andina de Naciones está en juego. De irse Ecuador, quedarían solamente Colombia, Perú y Bolivia como miembros de un bloque que pretende un mercado andino integrado. Un trio poco representativo de las ambiciones que se dieron los firmantes del Acuerdo de Cartagena que deseaban incluir a más países y no lo contrario.

Si Rafael Correa le dice no más a la CAN, podría ir a buscar nuevas salidas comerciales al sur del continente. Sin duda se concentrará en volcar sus exportaciones al ALBA y deberá esperar a que su país sea aceptado como miembro asociado de MERCOSUR.

Pero el presidente ecuatoriano no tiene otras opciones. Como escribe Walter Spurrier Baquerizo: “hay una situación de aislamiento comercial del Ecuador.” Es el único país de la Costa del Pacífico de América sin TLC con Estados Unidos. Además “el gobierno tampoco quiere un acuerdo con la Unión Europea”. Y finaliza el periodista alertando: “nos mantenemos al margen del bloque latinoamericano que busca estrechar relaciones comerciales con Asia”. Se refiere a la Alianza del Arco del Pacífico que están impulsando México y Colombia.

La Cámara de Comercio de Quito señaló que si Ecuador abandona la CAN, “perdería la única zona de integración comercial abierta al país” y  sería “una equivocación más del gobierno de Correa”.

viernes, 21 de octubre de 2011

Cristina Fernández de Kirchner sin rivales


21/10/2011


María Camila Morales


Las elecciones presidenciales del domingo en Argentina no tienen ningún misterio. Cristina Fernández de Kirchner ganará (incluso en la primera vuelta según encuestas) y su partido retomará el control en el Congreso.

Triunfo total del kirchnerismo que lleva en el poder desde el 2003 y ha logrado que Argentina llegue a niveles de crecimiento del 8% (2011) después de haber estado en bancarrota y en el abismo crediticio internacional.

La popularidad de la presidenta reflejaría el buen camino por el que va Argentina y la confianza en que El Frente para la Victoria es capaz de trabajar por un futuro aún mejor para el país. Como ella misma lo dice: “hemos logrado que la Argentina sea un refugio de las tormentas que se suscitan en un mundo convulsionado.”

Sin embargo, ciertas cifras juegan en contra de ella. Según la organización no gubernamental, Un Techo para mi País, medio millón de familias viven en “villas miseria” en las afueras de Buenos Aires. El número de barrios marginales argentinos ha doblado en los últimos diez años. La razón: la llegada de migrantes del interior que buscan trabajo (82%) y los extranjeros (bolivianos, peruanos, ecuatorianos) que se suman a la búsqueda de una mejor vida. En un editorial el periódico La Nación analizó los datos del censo 2010 y sentenció: la indigencia y la pobreza no se reducen en Argentina.

Para el Fondo Monetario Internacional, los argentinos tienen la segunda inflación más alta de la región con 11.5% anuales. El ritmo de creación de empleo ha bajado de 3.5% a 1.5% en cuatro años.

Pero Cristina Fernández de Kirchner pareciera ser de teflón ya que nada la afecta. Ni los escándalos de corrupción de sus colaboradores, ni la caída del precio de la soja, ni la fuga de capitales, ni el aumento del gasto estatal ni la disminución de los ingresos fiscales. Como escribió la periodista Lucrecia Bullrich: “Cristina sí está blindada”.

Es innegable que su carisma y el apaciguamiento de su discurso peronista (comparado con su difunto marido) le han ayudado a liderar las encuestas pero hay otro factor importante.

La oposición argentina no presenta ninguna alternativa concreta para el país. No solamente por estar dividida sino porque aparecen los mismos nombres de los clanes que combatió Néstor Kirchner en su momento. No hay renovación en el debate político argentino. Los apellidos de los protagonistas de la crisis del 2001 vuelven a aparecer. Duhalde, Alfonsín (hijo esta vez), Rodríguez Saá no pueden motivar ni entusiasmar a los votantes para cambios de modelos. Los diferentes aspirantes pasan su tiempo peleando por los votos que se quitaron entre ellos mismos. El candidato socialista Hermes Binner es el único que se desprende de la confusión opositora.

Una victoria por descarte parecería confirmarse este fin de semana porque no hay contra quien debatir los programas electorales que necesitaría Argentina. Si el crecimiento económico ha sido una estructurada bonanza, dónde está la inversión en salud, educación y seguridad?. Cómo cambiar las políticas que han fallado en los ocho años de mandato de los Kirchner?

Urge una oposición de verdad para Argentina. La alternancia es sana y conveniente sobre todo para evitar el caudillismo, los reinos o las dictaduras. Los cambios de generaciones y de ideas en el poder son indispensables para que la crítica muestre sus frutos y se avance hacia un mejor gobierno.

El periódico El Informador se interroga si realmente hay democracia sin oposición. Los argentinos deberán responder a esa pregunta el domingo.